Descubriendo el lenguaje de mi cónyuge

¿Qué debe de hacer si tiene su tanque lleno?
Vaciarlo, porque puede tener el tanque lleno y ser egoísta, no dar. Y las aguas que se quedan quietas se pudren, se dañan.

¿Qué más pueden hacer para descubrir su lenguaje de amor?.
Recuerde la etapa del enamoramiento, ¿Qué le hizo feliz para casarse con él o ella?, ¿Qué le conquistó de esa persona?

Debemos tener en cuenta que el amor es una decisión. Usted decidió un día amar a su cónyuge, y nadie puede quitar esa decisión, por lo tanto debe buscar soluciones, pero no puede destruir esa decisión.

Los conflictos, las heridas del pasado no pueden borrar el amor, porque es decisión, así que no intentes olvidar, borrar, aniquilar el pasado. El amor no lo borra, el amor hace diferente el futuro.

Si quiere olvidar el pasado no lo intente borrar, no sufra de amnesia pues tiene un cerebro perfecto que recuerda todo.

Lo que hice, lo que me hicieron ya está hecho. El amor me lleva a perdonarlo, el amor disculpa todo, el amor perdona todo.

Y si usted quiere tener un futuro diferente, tiene que tomar la decisión de descubrir el lenguaje del amor de su cónyuge y ponerlo en práctica, porque el amor no se ha acabado, el amor está ahí. Pero esta esperando que el bendito tanque se llene para tener fuerzas otra vez.

Llenar el tanque de amor del cónyuge es una decisión. El amor le da a usted seguridad, belleza; las personas que se aman en el matrimonio son hermosas, son bellas; las personas que no se aman son amargadas, corajudas.

El amor da sentido a la vida, es importante, tiene propósito, me hace feliz, pero el amor no da respuesta a esas cosas, el amor es el camino para entrar en estas cosas.

Por eso San Pablo llega a decir: "Puedo tener todas las riquezas, puedo hablar todos los idiomas, puedo tener todos los dones del espíritu santo, hasta subir a la santísima trinidad, pero si no tengo amor, de nada me sirve".

Es ese bendito tanque que tiene que ser llenado con el amor, con las cosas que el amor da. El amor jamás se acaba, se acaba la fe y la esperanza, menos el amor. Porque el amor es Dios, y a Dios nadie lo puede acabar, nadie.