Yo amante del amor. Yo un alegre joven que solo ha pedido siempre amor y ser querido como yo he querido a los demás, con mis alegres y tristes poesías. No parezco escritor. Con tanto jubilo seguimos escribiendo sin parar, hasta que un día nuestra poesía se detenga como nuestros dulces latidos, que parecen que cuando se emocionan pide amor y nos parece que nos grita desde el fondo de nuestra alma, pidiendo ese amor. Cada vez que escribimos son por los simples motivos de que estamos alegres y felices, y por otros, tristes y desolados, con nuestros versos, estrofas y poesías, que escribimos son cosas que sentimos dentro de esa cajita que llamamos corazón, pero en lo más profundo de nuestro corazón y de nuestra alma, hay otra que alegramos y destrozamos día a día, como son nuestros sentimientos. Que son los que lloran y sufren todo el amor, a todo lo hecho por uno y por otros. Y debemos de cuidar de lo mas brillante que tenemos cada uno. Como son nuestros sentimientos del corazón. Colaboración de:Alejandro Jaramillo G. |