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 La historia lo confirma: el hombre es por naturaleza un ser sociable. Necesita de otras personas a su alrededor para tener estabilidad emocional, gente que le brinde apoyo y amor, sobre todo el de una pareja. El amor de una pareja es imprescindible porque esta comprobado que cuando no lo tenemos y seguimos a si por mucho tiempo, es común que experimentemos profundos sentimientos de soledad, ansiedad, tristeza, vacío y depresión. Sin embargo hoy en día la necesidad de tener una pareja se enfrenta ante la dificultad de encontrarla; ¿a que se deberá?. Existen varias razones, entre ellas el ritmo de vida tan acelerado que llevamos, el exceso de trabajo, la falta de tiempo y la rutina; éstos factores provocan la limitación de los espacios que nos permiten socializar. Por otro lado la evolución que ha sufrido la sociedad en la actualidad y el concepto del rol hombre-mujer en las relaciones de pareja tiene tantos modos ( va de lo más tradicional hasta lo más liberal), que resulta completamente comprensible que ahora sea tan complicado encontrar a alguien afín. Aun asi y ante tantos puntos en contra, existen soluciones rápidas y eficientes; nos referimos a las tradicionales agencias matrimoniales que en esta era de la globalización te hechan la mano para encontrar a tu media naranja. Este es un sistema mucho más seguro para encontrar a la persona que más conviene porque procuran el contato directo entre los interesados; otras de sus ventajas es el ahorro de tiempo, riesgos y la garantía de veracidad, seriedad y transparencia. Su operación se basa en crear archivos de datos con personas de diferentes edades, gustos, ideologías, posición económica, etc, y con las que organizan reuniones o eventos donde es posible coincidir y conocerse. La agencia propicia el encuentro, pero es responsabilidad de los participantes el curso que den a las relaciones que recién establecen y los resultados que obtengan. Existen algunas agencias más especializadas y formales que cuentan con profesionales en comportamiento humano(psicólogos, sociólogos). Ellos investigan los antecedentes de cada persona y analizan su personalidad, asi una vez que se establecen perfiles personalizados, los asesores de estas agencias sugieren candidatos que tengan afinidad de caracteres y propician el contacto. Este proceso es mucho más rápido que lo común, ya que desde un principio la persona establece que tipo de relación esta buscando y con quien, por su parte los asesores le proporcionan resultados más acertados. Y ante el temor de la persona a ser engañada, las agencias matrimoniales serias y profesionales con el fin de brindarles mayor seguridad a sus clientes, investigan y comprueban que los datos personales de la gente que solicita sus servicios sean correctos. ¿Cómo me inscribo en una agencia matrimonial? Cada agencia tiene una manera diferente de operar, comunmente los servicios se solicitan visitando directamente la agencia matrimonial o ahora mucho más fácil, contactarlos via internet, ya que varias agencias tienen presencia a través de un sitio web. Una vez inscrito(a), se hace una entrevista y se tiene que llenar un formulario. Esto para conocer y saber los interéses del participante. Tambien solicitan fotografias. Enseguida y en función de las preferencias y de distintos parámetros( edad, la situación socieconómica, las creencias, el aspecto físico y el estilo de vida), seleccionan a las personas más adecuadas. Finalmente se proporcionan los datos de las personas seleccionadas y programan las citas para que se conozcan.
A la antigua o a lo moderno, a través de las agencias matrimoniales o por medio de la red, el encontrar una pareja estable dependerá del tiempo que se dedique a conocer a la persona, el trato diario y la convivencia. Independientemente de cuál fue el punto de encuentro, es el sentido común y la honestidad con uno mismo quienes nos dirán si él o ella son los indicados.
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