Aunque para algunos suene decepcionante, ni el azar o el destino determinan la manera en la que elegimos a nuestra pareja. ¿Por qué? Según algunas corrientes de la psicología, la elección de nuestra pareja ocurre por múltiples factores y de forma inconsciente, ya que nuestra mente es capaz de analizar y etiquetar a gran velocidad lo que nos rodea, sin siquiera darnos cuenta de ello. Por ejemplo, tomado en cuenta el punto de vista de algunas corrientes psicológicas (psicoanalítica, sistémica) las parejas se clasifican en varios tipos, cuyos integrantes se eligen con base en ciertos criterios, por ejemplo, las experiencias de la infancia, y esto se realiza gracias a que existe una tendencia inconsciente a asignar roles a uno mismo y a los otros (Teoría Psicoanalítica).
Así que aquellas relaciones conflictivas, desilusiones y dependencias no resueltas, estimulan la esperanza de que con una pareja se corregirán y se compensarán, y que se recuperarán experiencias que no se pudieron vivir anteriormente. Por otro lado, de acuerdo con el punto de vista psicodinámico, el proceso de elección de pareja está relacionado con las experiencias que la persona ha tenido en la relación con sus padres. Para los terapeutas sistémicos los comportamientos de una pareja pueden tender hacia la complementariedad, en la que uno de los miembros se sitúa en posición de "superioridad" con respecto al otro; o pueden tender hacia la simetría, en la que ambos miembros pueden tener igual capacidad de asumir responsabilidades y tomar decisiones. Ahondemos un poco más entre estos dos tipos de parejas: Parejas complementarias
Características Son aquellas con conflictos y deseos similares, pero con un manejo diferente de ellos. Dinámica de pareja Una persona que tiene deseos de ser cuidado y protegido busca a alguien que esté dispuesto a hacerlo y de esta forma poner fin a esos deseos insatisfechos. El otro lado, el protector, es capaz de renunciar a sus deseos de protección porque se siente bondadoso y competente satisfaciendo las necesidades del otro miembro. Ninguno quiere renunciar a su función, el protegido porque sus deseos están satisfechos y el protector porque en ello ha encontrado una forma de valorización y reafirmación personal. Conflicto Con el correr del tiempo el conflicto surge cuando cada uno se empeña en satisfacer los deseos propios, y la pareja no responde a ellos e incluso trata de impedirlo. Parejas simétricas
Características Son parejas que luchan por el poder, son feroces, pelean hasta casi destruirse pero si están sin el otro se mueren. En este tipo de parejas los dos son personas independientes, exigentes consigo mismas, algo desconfiadas y muy preocupadas de la reciprocidad y la justicia. Dinámica de pareja Al inicio de la relación mantienen un cierto equilibrio entre los deseos de dependencia y las aspiraciones de autonomía. Conflicto Se da cuando un miembro de la pareja necesita desarrollar su autonomía y se encuentra con la resistencia del otro miembro. Hay crítica, rabia y desvalorización. Es entonces que se desarrolla la lucha por el poder en la que cada uno siente que si acepta lo que dice el otro, perderá su puesto y será sometido. Asimismo, establecen una relación competitiva en la cual cada uno aplica su energía y creatividad a fin de establecer indiscutibles pruebas de que el otro está equivocado. Cada uno adjudica al otro sus frustraciones, ninguno de ellos puede descubrir sus propias limitaciones. No pueden manifestar necesidades, la rabia bloquea otras emociones y se niegan reconocimiento mutuo y tampoco pueden perdonar al otro. Fuente: |